No era una carretera con todas las de la ley, más bien un camino de piedras. Habíamos asaltado la cima de la montaña, a 338 metros sobre el nivel del mar, gracias a las mañas de un hombre sobre su viejo Lada.
Arriba, el paisaje era hermoso y nos recibieron Maximiliano y su esposa, ambos trabajadores de Flora y Fauna, encargados de velar desde las alturas y atender a los visitantes. Arriba, se podía tocar la inmensidad, respirar un aire limpísimo y tomar agua de coco. Arriba, unos mosquitos inmensos, los más grandes que he visto y me han picado en mi vida, hacían de las suyas.
En medio de la excitación por tanta belleza, el cuerpo ejecutaba una danza extraña, necesaria para espantar a los abusadores con lanzas. Fuera de toda compostura, entre los manotazos y los salticos, no me quedaba claro cómo iba a lograr arreglármelas para lidiar con la agenda, la grabadora y mirar a los ojos a mi entrevistado.
Todo salió bien. Maximiliano puso a quemar unas cáscaras de coco y los mosquitos hicieron como que se asustaron, aunque siguieron picando. A la hora de regresar ya no estaba el lada y no había tiempo que perder. Había que bajar la Loma de Cunagua a pie. Algunos protestaron: ¡7 kilómetros!, la esposa de Maximiliano se puso las manos en la cabeza y aseguró que los mosquitos acabarían con nosotros. Ella tenía razón.
Pero había que bajar, así que iniciamos la marcha. Descender me permitiría regodearme con los sonidos del bosque, bañarme de verde, disfrutar de las sinuosidades del lomerío de Ciego de Ávila. Finalmente lo cumplí todo, pero constantemente castigada por una nube de pequeños asesinos.
¿De quién fue la idea de ponerse un short para venir hasta aquí?, me preguntaba a cada paso del descenso. Pero ya no había remedio, es lo que pasa cuando se anda en grupo y alguien amanece diciendo: Muchachitas, hoy todas vamos a ponernos short.
Mientras la nube de mosquitos se daba banquete con mis piernas, yo pensaba que no me debía dejar provocar, que aquella era una experiencia única. Absorta, concentrada en el verde, no dejaba ni un segundo de agitar el chal, un intento desesperado e inútil de espantar a las bestias.
Cuando faltaba solo un kilómetro, o dos, pasamos frente a una casita que en el ascenso sobre ruedas me había parecido como sacada de un libro de cuentos. Alrededor de la puerta unos campesinos descansaban. Después de haber hecho un recorrido visual por las anatomías, de comprobar por nuestras caras cansadas, que solo podíamos ser citadinos desacostumbrados a las caminatas; pero sobre todo después de detenerse en las ronchas y en los manotazos acompasados, la voz de uno de ellos irrumpió en el silencio. Con una risita socarrona preguntó:
-Eh, ¿hay mucho mosquito por allá arriba?
– Nooooooo, qué va- respondí con evidente y sonora ironía.
Entonces su riposta fue contundente:
Bueno, lo de ustedes es solo un día, nosotros tenemos que sacarles el pecho todos los días.
Y el guajiro siguió su burla alevosa a partir de nuestras caricaturas recortadas en el camino, de nuestras sacudidas y de todos y cada uno de nuestros intentos, infructuosos, por espantar su cotidianidad.
Estimada Nyliam: Al leer su experiencia con los mosquitos decidí enviarle la mia.Si le parece bien publíquela.Gracias:Modesto Reyes Canto.
“DOBLE CACERIA”
Desde que empiezan las primeras lluvias a caer para beneficio de plantas,animales y personas, casi siempre aparece alguno de esos animalitos,insecto,bicho y hasta hp,como prefiera llamarlo,que desde que llega pone a todo el mundo,incluyendo gobiernos hasta de paises superdesarrollados.a la caza de él porque él a partir que ya esta listo para desayunar,almorzar,cenar y hasta merendar y trasnochar,estarâ a la caza suya:Me refiero a ese vampiro disfrazado que responde, sin que él lo sepa,al nombre de mosquito.Este insignificante insecto, por su diminuto tamaño, es capaz de hacer mas daño trasmitiendo enfermedades algunas de ellas mortales,que las bajas que pudieran haber en una guerra feroz entre dos potencias nucleares que hasta el dia anterior del conflicto se hacian llamar paises hermanos.
Aunque el mundo actual estâ lleno de organizaciones protectoras de animales creo que jamas se crearâ una para proteger al mosquito.Toda la humanidad,sin distinciones de razas,religiones,ideologías políticas,orientaciones sexuales de todo tipo,en lo único que estân de acuerdo es en aplaudir, hasta sacarle la sangre que ha chupado, al aborrecible mosquito donde quiera que llegue sin que nadie lo haya invitado;asi venga con bandera blanca desplegada o con la insígna de la cruz roja.
Desde que el mosquito entra en escena la vida no es igual para los escogidos por él como blanco para saciar su inmenso apetito que parece no tener fin y no importa que su sangre sea a positiva como o negativa.Si sale usted al patio,su patio que ya es de él,le caen en pandilla con todas las malas intenciones de dejarlo sin sangre.Y cuando se cuela uno en su casa,que pasa a ser de él tambien como el patio que ya le quitó, no se va de allí hasta que esté repleto de sangre,que era suya,o que lo logren adivinar con un disparo doble de calibre 45 ,porque por los métodos conocidos casi siempre lo único que se logra es que se rían de uno picando mas fuerte y seguido.Que si el humo los aleja….no es cierto,yo he visto mosquitos absorber mas humo que catador de tabacos en una fâbrica en plena producción.Que si el frío los mata…..Incierto.En mi casa entran a través del aire acondicionado que estâ puesto a temperaturas congelantes como para recibir a osos polares y que se sientan como en su habitat.Con los fumigadores en spray hacen gargaras.Ahora,eso si,nunca he probado quemar la casa con ellos adentro,que alguien me dijo que eso si funciona, aunque ganas no me han faltado.
Hace poco,recien caido el primer chubasco de la primavera,entró en la casa un mosquito.Uno solo menos mal.Picó a mi esposa,a dos hijos,a tres sobrinos conjuntamente con dos nietos que estân visitandonos,a otras amistades de visita también y a mi.Y despues de todas esas picadas decidimos que teniamos que cazar, al que ya nos había cazado, a como diera lugar.Y hasta adoptamos el grito de Los Tres Mosqueteros de Dumas y al,”uno contra todos y todos contra uno”,comenzamos la cacería.(por cierto esa conocida frase dicha por los Mosqueteros,en la primera oración demuestra valor,gallardía.La segunda oración dicha en estos tiempos a los Mosqueteros y a Dumas los acusarian de pandillerismo)
Mi mujer cogió una chancleta que a educado a todos nuestros hijos.Uno de mis hijos agarró una escoba.
Un sobrino una tohalla,recordando quizas cuando era boxeador y de la esquina tuvieron que tirarle una para evitar que le siguiera partiendo las manos al contrario con la cara.Alguien un búcaro de flores;otro las flores secas del búcaro y yo aproveché y agarré un caldero lleno de garbanzos
que le habian quedado malisimos a mi esposa y grité;Este si va a saber lo que es malo.
Resultado de aquella mini-operación bélica?…Un televisor y el búcaro roto.Un cuadro de una tatarabuela hecho en oleo y que había pasado de generación en generación,no va a llegar a la próxima.Uno de los muchachos se fracturó un brazo cuando tirandole un manotazo al mosquito le dió a una pared de ladrillo.Y hubo otros desastres dentro de la casa por culpa del HP como ya le deciamos todos, pero lo único que logramos en la caceria fue poderlo ver como se escapaba por la puerta por donde mismo había entrado y que a ninguno de nosotros se nos ocurrió mantener cerrada sabiendo que ya estaba lista la temporada para que hicieran su entrada.Al final llegué al convencimiento,despues de todas las picadas y destrozos que se hicieron,que la mejor y eficaz manera para matar un mosquito es….con la indiferencia.
Escribe: Modesto Reyes Canto
Muy buena faena, Modesto. Bienvenido a los Ojos. A ver si puedo seguir su consejo, aunque dudo que pueda ser indiferente, porque me pican y me hacen unas ronchas!!!!!
Nyliam: Hasta “burlada” escribes (y eres) hermosa. Me hubiera gustado estar allá, como mi quijotesca figura, desafiando con mi adarga a esos abusadores con lanzas. Pero no hizo falta: fuiste a la vez doncella y heroína y, de tu batalla, nos regalas este post que sobrevivirá a cualquier enjambre.
!Qué alegría me da cada vez que apareces!Viste, Enrique, que fui valiente y gané. Un abrazo largo.
Hola, Nyliam: pasando mi mirada por la potencia de tus “Ojos” lo mismo me haces reír que poner la mas seria de las caras, al comprender cuanto debes haber sufrido con los “abusadores con lanzas”. Bueno, esa es una experiencia mas, ya sabes que cuando vuelvas tus “andanzas” en busca de los “sonidos del bosque” debes llevar repelente para insectos. Ojalá no hayas sufrido tanto en las demás historias por nuestra tierra. Sigo mis pasos tras tus potentes “Ojos…”
Los sonidos verdes fue lo mejor. De hecho, fue de lo primero que escribí.
Hola N, hasta ahora no nos has dicho el motivo del viaje, no será para subir lomas porque escogieron la zona mas llana del país para hacerlo, 338 m y en lada?, bueno no te vayas a hacer una idea equivocada de las montañas, ni en el Escambray ni en la Sierra Maestra hay mosquitos, en los 90´s yo solía pasar mis vacaciones en medio del Escambray en una escuela de geología habilitada como campamento de verano, es una hermosa experiencia, ya una vez comenté eso en un artículo tuyo. By the way…. el pobre guajiro quedó anonadado luego del “recorrido visual por tu anatomía” , los nervios le dieron por eso………..
No, Juan Carlos, no se trataba de escalar montañas. Estuve en un recorrido por Ciego de Ávila y Villa Clara para luego escribir unos reportajes para JR. Saldrán pronto. El asunto es que en esa loma, bajita, hay un puesto de guardabosques y había que llegar hasta allí. Ah!! y lo único que se llevó el guajiro nervioso fue una mueca cansada…:)
pero hermanita del alma… cómo se te ocurre???
qué bueno, Nyliam, que hayas regresado cargada de historias…aunque hubiese preferido que ninguna nube de mosquitos se diera banquete con tus piernas. 😦
No importa, los mosquitos hicieron que me concentrara más en los sonidos del bosque. 😉
Vi un reporte policial que dice que fue detenida una banda de mosquitos cerca del lugar de los hechos. Todos estaban embriagados, alucinando. El reporte refiere que los “sospechosos” alegaron haber bebido un dulce néctar que extrajeron de unas piernas que, según consta en su declaración, eran de las más bellas que habían visto. Me pregunto qué escribiría uno de esos mosquitos si pudiera dejar un comentario en tu blog…, algo así como: “abusadoraaaa!!!!”